El SPDR S&P 500 ETF Trust SPY (NYSE:SPY) cotizaba un 0,06% a la baja el miércoles, después de que el Departamento de Trabajo reportara un aumento del 8,3% en el índice de precios al consumidor (IPC) durante el mes, lo que indica que la inflación se encuentra cerca de máximos de 40 años.
Lo que ha sucedido
El IPC general subió un 8,3% en abril, ligeramente por debajo del 8,5% de marzo, pero por encima de las estimaciones de los economistas del 8,1%. Antes de 2022, el IPC no había subido un 8,3% durante ningún mes desde 1982.
La inflación básica, que no incluye los precios volátiles de los alimentos y la energía, subió un 6,2% en abril, por encima de las estimaciones de los economistas que apuntaban a una subida del 6%.
Los precios de los alimentos subieron un 0,9% intermensual y un 9,4% interanual. Los precios de la energía bajaron un 2,7% en abril, pero han subido un 30,3% en los últimos 12 meses. Los precios de los coches usados bajaron un 0,4% intermensual, pero siguen un 22,7% por encima de los precios del año anterior.
La última lectura de inflación del IPC se produce después de que el Departamento de Trabajo informara a principios de este mes que los salarios estadounidenses subieron un 5,5% interanual en abril. Lamentablemente, las últimas cifras de inflación sugieren que los precios están subiendo más rápido que los salarios para muchos estadounidenses.
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La opinión de los expertos
Jeffrey Roach, economista jefe de LPL Financial, ha señalado que la primera caída mensual de la inflación del IPC podría ser un punto de inflexión psicológico importante para los consumidores.
“Es probable que los datos de abril no cambien las expectativas de que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) suba 50 puntos básicos en su próxima reunión del 14 al 15 de junio”, ha comentado Roach.
Bill Adams, economista jefe de Comerica Bank, dijo que la desaceleración del IPC fue consecuencia de la bajada de los precios de la gasolina y los coches usados, pero que es probable que la inflación continúe superando el rango objetivo de la Reserva Federal hasta finales de 2023.
“Pero los precios de los servicios rígidos siguieron subiendo rápidamente en abril, lo que evidencia que el impulso de la inflación sigue siendo fuerte”, ha expresado Adams.
Chris Zaccarelli, director de inversiones de Independent Advisor Alliance, ha afirmado que las cifras de inflación de abril fueron decepcionantes y eliminaron un catalizador potencial para que se produzca un repunte del mercado de valores.
“Habrá al menos cuatro subidas de las tasas de 50 puntos básicos este año y no tres o menos, y seguiremos siendo cautelosos con los activos de riesgo”, ha añadido Zaccarelli.
Joseph Brusuelas, economista principal y jefe de RSM US LLP, ha resaltado que la elevada inflación no brinda mucha comodidad a los consumidores estadounidenses.
“Aunque en este ciclo económico la inflación probablemente alcanzó su cénit en marzo, cuando los precios del transporte y otros bienes industriales bajaron con respecto al año anterior y la inflación general bajó del 8,5% del último mes al 8,1% en abril, no creo que esto vaya a proporcionar alivio alguno a los hogares que experimentan una pérdida de poder adquisitivo ni a los legisladores que intentarán restaurar la estabilidad de precios sin provocar una recesión”, ha declarado Brusuelas.