GUANGZHOU, China, 25 de abril de 2023 /PRNewswire/ — “¿Qué te viene a la mente cuando piensas en Kung Fu chino?” Jesper Lundqvist de Copenhague, Dinamarca, le preguntó a GDToday de Nanfang Media Group mientras grababa la serie de microdocumentales “My Guangdong Story”, “La gente de todo el mundo comparte diferentes opiniones sobre el Kung Fu. Para vencer los estereotipos y perseguir el Kung Fu real, renuncié a una vida cómoda en Dinamarca para venir a Foshan”.
Lundqvist se encontró con Wing Chun en una exhibición de artes marciales en su ciudad natal alrededor de 1992. “Diría que hasta la fecha, esa fue la mejor y más inspiradora demostración de artes marciales que he visto”. Quedó fascinado y se fue a un curso de Wing Chun. Desde 2008, Lundqvist ha estado viajando entre Europa y China, solo para practicar Kung Fu chino real.
En 2012, decidió establecerse en Foshan, el lugar de nacimiento preeminente de los estilos sureños de artes marciales chinas, y se convirtió en discípulo de un maestro de Foshan Wing Chun. Descubrió que muchas de las cosas que los europeos han aprendido sobre el Wing Chun no procedían de China, sino que las desarrollaron ellos mismos. En China puede practicar el muñeco de madera, que en Europa se considera la “última parte del sistema Wing Chun”.
Lundqvist aprendió que hay muchos maestros de Kung Fu que quieren enseñar, ya sea que sus aprendices sean chinos o extranjeros. “Pero hoy en día en China, es un poco difícil para ellos encontrar discípulos”, dijo Lundqvist, “En Occidente, hay muchos entusiastas de las artes marciales chinas que realmente no tienen ningún contacto con los maestros locales”.
Por lo tanto, Lundqvist y su esposa intentaron crear un puente entre los entusiastas del Kung Fu en el extranjero y los maestros en China. Han entrevistado a más de 100 maestros y publicado artículos relevantes en revistas extranjeras y en Facebook. Lundqvist también ha recibido muchos visitantes globales que vinieron a Foshan con el deseo de aprender Kung Fu y les presentaron a los maestros locales de Kung Fu. Mientras tanto, reúne a maestros para realizar seminarios, conferencias y cursos de capacitación en Europa para que las personas en el extranjero puedan experimentar el Kung Fu de primera mano.
“Para mí, Kung Fu es vida”, subrayó Lundqvist. Luego, planea hacer documentales que presenten diferentes aspectos del Kung Fu. “Mi esperanza es que a través de este trabajo, la gente pueda entender mejor las artes marciales chinas tradicionales y apreciar mejor esto”.
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