Tesla Inc. (NASDAQ:TSLA) enfrenta un retraso en la aprobación de su tecnología de conducción autónoma en China, un obstáculo atribuido a la actual guerra comercial entre EE.UU. y China.
Lo que sucedió
Las autoridades chinas podrían estar utilizando la aprobación de la licencia de conducción autónoma de Tesla como una estrategia de negociación en las conversaciones comerciales con EE.UU., lo que se cree que es la razón principal del retraso, informó el Financial Times el lunes.
Aunque inicialmente se esperaba que Tesla obtuviera una licencia para entrenar ampliamente su Full Self-Driving (FSD) Beta en el segundo trimestre de 2025, la compañía ahora ha sido informada de que el proceso no tiene un plazo definido. Tesla ha estado trabajando para lanzar su sistema FSD en China durante años, y en 2024 se rumoreaba que estaba cerca de cerrar un acuerdo.
En la reciente llamada de ganancias de Tesla, el CEO Elon Musk expresó su preocupación sobre el futuro del FSD en China, señalando las restricciones en la transferencia de datos entre ambos países. “Actualmente no nos permiten transferir videos de entrenamiento fuera de China. Y el gobierno de EE.UU. no nos deja entrenar en China. Es un verdadero dilema”, declaró Musk. Como alternativa, Tesla está entrenando su sistema utilizando videos públicos de calles chinas y herramientas de simulación.
A pesar de estas dificultades, Musk sigue siendo optimista y afirmó que Tesla espera alcanzar la conducción autónoma sin supervisión en China para finales del próximo año.
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Por qué es importante
Los desafíos de Tesla en China no son nuevos. En 2022, el gobierno chino comenzó a restringir el acceso de los vehículos Tesla a ciertas áreas por preocupaciones de seguridad nacional. La prohibición se extendió al distrito de Beidaihe durante dos meses durante el retiro de verano anual del Partido Comunista y también cerca de complejos militares durante la visita del presidente Xi Jinping a Chengdu.
Mientras tanto, la competencia en el sector de los autos autónomos en China se ha intensificado, con rivales como BYD Co. Ltd. (OTC:BYDDY) y Huawei avanzando en la industria. BYD lanzó su sistema avanzado de asistencia al conductor “Ojo de Dios” en todos sus modelos, incluido el hatchback económico Seagull, con un precio inicial de aproximadamente 9.600 dólares.
Además, Ross Gerber, CEO de Gerber Kawasaki Wealth and Investment Management, destacó que todos estos competidores “usan tecnología LIDAR”, mientras que Tesla apuesta únicamente por cámaras.
A pesar de estos obstáculos, Tesla sigue operando en China. La empresa anunció el lunes que ha comenzado la producción de su renovado Model Y en su gigafactoría de Shanghái, con entregas previstas próximamente. Las tensiones comerciales y el retraso en la aprobación del FSD subrayan la complejidad del mercado chino para Tesla.
Movimiento del precio de Tesla
Las acciones de Tesla cayeron más del 16% en un mes, cerrando en 355,84 dólares el viernes.
Imagen a través de Shutterstock
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