El Dow Jones cerró en 29.950,44 mientras que el S&P 500 cerró en 3626,91 después de que Moderna Inc (NASDAQ:MRNA) dijera que su vacuna contra el coronavirus ha demostrado tener más de un 94 % de efectividad en ensayos clínicos preliminares. Las últimas noticias positivas relacionadas con la vacuna para la Covid-19 llegan solo una semana después de que Pfizer Inc. (NYSE:PFE) anunciara que su candidata a vacuna tiene un 90 % de efectividad.
Los inversores tienen la esperanza de que estas noticias tan extremadamente buenas que llegan del frente de las vacunas traigan consigo la normalización de la situación económica para 2021. Pero dado que el S&P 500 ya ha subido más del 60 % desde sus mínimos de marzo, podría ser difícil determinar cuánto alza queda en los próximos meses.
Momento alcista: Una de las mayores fuerzas impulsoras del repunte del mercado de 2020 ha sido un estímulo gubernamental sin precedentes, y la mayoría de los inversores esperan otro paquete de estímulo en un futuro próximo.
Brian Price, jefe de gestión de inversiones de Commonwealth Financial Network, dijo que el impulso a corto plazo es beneficioso y que la reciente rotación en acciones de valor es un avance positivo.
“El camino de menor resistencia para las acciones parece ser más alto en este momento, ya que las noticias favorables sobre las vacunas, junto con la disipación de la incertidumbre con respecto a las elecciones presidenciales de EE.UU., están demostrando ser un catalizador positivo a corto plazo”, declaró Price. “Nos parece alentador estar observando una rotación de acciones orientadas al crecimiento y al impulso a nombres cíclicos y de valor”.
Pronóstico a largo plazo: Una vez que la economía se haya recuperado por completo, es probable que los inversores desvíen su atención al impacto inflacionario que tendrán las medidas de estímulo económico del gobierno sobre el valor del dólar. La Reserva Federal ha indicado que no tiene la intención de subir las tasas de interés hasta al menos 2023, pero un aumento en las tasas de inflación muy por encima del 2 % podría forzar la mano de la Fed.
Ivan Feinseth, analista de Tigress Financial, dijo que los inversores no deberían preocuparse por los aumentos de las tasas de interés en este momento, ya que el hecho de que suban las tasas de interés es un indicio de la salud de la economía.
“Sigo pensando que eso todavía queda muy lejos, pero las noticias que llegan sobre las vacunas son buenas. Sin embargo, se tardará un tiempo en aumentar la producción y vacunar a todo el mundo, por lo que todavía se habla de volver a la normalidad en torno a principios del año 2022 y se cree que se producirá una mejora dramática en la situación y en la economía a partir de principios del año que viene cuando la pandemia pierda fuerza con la llegada de la vacuna”, explicó Feinseth.
La opinión de Benzinga: Es probable que, en este momento, las preocupaciones por la subida de las tasas de interés y la inflación estén a años de distancia. Las mayores preocupaciones a corto plazo para los inversores son la gravedad de la oleada del coronavirus de este invierno, así como la envergadura y las fechas del próximo estímulo económico.