En una etapa de pausa monetaria y con las tensiones globales algo suavizadas, algunos inversores en España buscan señales claras. Sergio Ávila, analista senior de IG, las ofrece con nombre y apellidos: Santander (BME:SAN), Sabadell (BME:SAB) y Telefónica (BME:TEF). Su enfoque técnico sugiere que hay oportunidades bajo la superficie tranquila del IBEX 35.
Lo que sucedió
Sergio Ávila ha identificado un momento de consolidación en los mercados europeos, dentro de una tendencia alcista de fondo. Según explica en su análisis, el parón en las bajadas de tipos por parte del Banco Central Europeo marca un punto de inflexión: ya no hay más estímulos inmediatos, pero el entorno sigue siendo propicio para los activos de riesgo.
El contexto internacional también juega su papel. Las relaciones entre China y Estados Unidos, aunque aún tensas, muestran señales de distensión. El mercado, al menos por ahora, respira más tranquilo. Esta percepción favorece a los valores cíclicos, como los bancarios o las telecos, especialmente en Europa.
Desde el punto de vista técnico, el Eurostoxx 50 forma un triángulo simétrico: una figura que suele anticipar una continuación de tendencia. Ávila marca los 5450 puntos como referencia clave. Si el índice supera ese umbral con un cierre diario, se abriría la puerta a nuevos máximos.
En este entorno, Ávila pone el foco en tres acciones del IBEX 35. Santander, que tras superar los 6,64 euros apunta a los 8 euros; Sabadell, que mantiene su objetivo en 3,44 euros pese al ruido por la OPA de BBVA; y Telefónica, que busca consolidar los 5 euros tras una breve corrección.
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Por qué es importante
La lectura de Ávila llega en un momento de pausa cargada de significado. El BCE ha detenido sus recortes de tipos tras ocho bajadas consecutivas, según los últimos movimientos recogidos por Estrategias de Inversión. Esto supone un nuevo equilibrio: los estímulos se moderan, pero el dinero barato no desaparece. Para valores como Sabadell, que se benefician de tipos aún en niveles elevados, el entorno sigue siendo favorable.
Además, el análisis técnico adquiere un peso especial cuando el ruido macro se suaviza. Según Ávila, las figuras como el triángulo en el Eurostoxx o los niveles técnicos en Santander y Telefónica permiten actuar con referencias claras. En fases laterales, esos patrones son brújulas más fiables que los titulares.
La herramienta de las opciones barrera refuerza esta lógica. Ávila propone usarlas como escudo y lupa: reducen el riesgo máximo conocido de antemano, incluso frente a huecos de mercado, y amplifican los rendimientos potenciales. En su ejemplo con Sabadell, una pequeña inversión con 22,45 euros de riesgo puede tener un recorrido amplio si el valor alcanza el objetivo.
Imagen creada con Inteligencia Artificial
Esta historia fue generada por Benzinga Neuro y editada por Edgli Romero
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