Robert Kiyosaki, famoso por su libro “Padre rico, padre pobre” de los años 90, ha sido recientemente un gran defensor del Bitcoin. Es un aficionado a las características deflacionarias del token, así como de otros activos como el oro y la plata. Kiyosaki profundizó en su postura después de los recientes eventos que involucraron a la Reserva Federal y a su presidente, Jerome Powell.
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En una publicación en X, Kiyosaki dijo: “El presidente de la Fed, Jerome Powell, finalmente ha dicho la verdad. La semana pasada finalmente admitió que la inflación está ganando. La Reserva Federal ya no puede prometer una inflación del 2% o que la inflación es “transitoria”. Otra vez que finalmente ha dejado de mentir. Enhorabuena. El problema es que la mayoría de las personas no tienen idea de lo que lo que admitió el presidente de la Fed significa para ellos, sus familias o para el mundo. En mi lenguaje simple significa “¡Estamos jodidos!”.
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Es probable que Kiyosaki se refiera a un discurso que Powell dio en la Universidad de Stanford, en el que señaló que la inflación “se está moviendo hacia el 2% por un camino a veces accidentado”, después de los datos de inflación de enero y febrero de 2024. Sin embargo, es probable que Kiyosaki esté sacando de contexto algunos de los comentarios de Powell; el presidente de la Fed nunca dijo que no pueda prometer la inflación en el 2%.
Janet Yellen, la anterior presidenta de la Fed y actual secretaria del Tesoro, admitió que lamenta “haber dicho [que la inflación era transitoria]” a principios de 2021.
Aunque Kiyosaki puede estar exagerando las afirmaciones de Powell, la lógica subyacente es que los bancos centrales abusan de su poder en términos de impresión de dinero para impulsar la economía: “El dólar ha perdido el 95% de su poder adquisitivo desde 1913, el año en que se formaron la Fed y el IRS”, escribió Kiyosaki.
Mantener el dinero en efectivo podría resultar en la pérdida de poder adquisitivo por la inflación. Sin embargo, Kiyosaki es un “defensor del dinero real, y [él] solo guarda oro, plata y Bitcoin real”.
A diferencia de los bancos centrales, que están controlados por personas con diferentes incentivos, el Bitcoin, el oro y la plata tienen suministros limitados, lo que les permite almacenar valor con el tiempo.
El Bitcoin funciona como un ejemplo de un activo con características deflacionarias. El suministro de Bitcoin está limitado a 21 millones de tokens, y una pequeña cantidad de nuevos tokens se liberan en el suministro. Además, la cantidad de nuevos tokens liberados se reduce a la mitad aproximadamente cada 4 años; se espera que el próximo halving se produzca alrededor del 20 de abril.
Esto significa que el suministro es limitado y puede proyectarse en el futuro. Sin la interferencia humana en el suministro, el token podría adquirir valor frente al dólar, lo que es lo que ha sucedido en ciertos momentos durante la última década.
Aunque la visión de Kiyosaki de la Reserva Federal puede no ser del todo precisa, la idea de que ciertos activos pueden funcionar bien durante los periodos de alta inflación es en gran medida correcta. Con la inflación que parece acercarse al objetivo del 2% de la Fed, será interesante ver cómo las decisiones políticas de la Fed afectarán al precio del Bitcoin en el futuro.
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