Uno de los mayores temores entre los inversores en lo que va de 2021 ha sido que una inflación superior a la esperada podría llevar a la Reserva Federal a actuar antes y de forma más agresiva con medidas de endurecimiento, como posibles subidas de las tasas de interés.
En el último mes, los inversores del mercado de bonos han visto con menos seguridad que la Reserva Federal vaya a aumentar las tasas de interés antes de 2023, pero aún están valorando una probabilidad superior al 50% de que haya al menos un aumento en 2022.
Los números
Según la herramienta FedWatch de CME Group, el mercado de bonos actualmente tiene una probabilidad del 56,8% de una subida de tasas para diciembre de 2022. La buena noticia para los inversores en acciones es que esa posibilidad ha bajado del 70,2% de hace un mes.
La semana pasada, el Departamento de Trabajo informó de que su índice de precios al consumidor (IPC) subió un 5,4% respecto al año anterior, su mayor crecimiento interanual desde agosto de 2008. El crecimiento del IPC básico, que no incluye los precios de los alimentos y la energía, subió un 4,5% en junio, su mayor salto desde septiembre de 1991.
La Reserva Federal ha dicho constantemente que los niveles elevados de inflación en 2021 son “transitorios”, ya que la economía se está reabriendo tras la pandemia y los inversores no deberían preocuparse de que las lecturas recientes de inflación estén muy por encima del objetivo a largo plazo de la Fed del 2%.
“Hemos identificado media docena de cosas” que “se asemejan a factores temporales que disminuirán con el tiempo”, expresaba el presidente de la Fed, Jerome Powell, al Congreso la semana pasada.
El consenso entre los inversores en bonos parece establecerse en que la primera subida de intereses de la Fed no se producirá hasta al menos la segunda mitad de 2022. El mercado de bonos está valorando actualmente un 0% de probabilidad de un aumento de tasas para finales de 2021 y solo un 18,1% de posibilidades de un ajuste para junio de 2022.
Los inversores confían en la Fed
El pasado lunes, el cofundador de DataTrek Research, Nicholas Colas, señaló que un plazo de finales de 2022 para la acción de la Fed sugiere que los inversores en bonos no están demasiado preocupados por la inflación.
“Eso nos parece correcto e implica que la inflación estadounidense disminuirá en línea con la opinión de la Fed de que los niveles actuales de +5% son transitorios”, según Colas.
“Los futuros de los fondos de la Fed tienen un buen historial de estimación a través de las opiniones políticas, ocasionalmente erróneas, declaradas públicamente por el ente financiero, por lo que su precio actual implica que el FOMC va por buen camino”.
La opinión de Benzinga
La Fed ha alentado a los inversores a ignorar en su mayoría las cifras de inflación por ahora, y la ganancia del 12,9% del año hasta la fecha por parte del SPDR S&P 500 ETF Trust (NYSE:SPY) sugiere que la mayoría le ha escuchado por el momento. Sin embargo, los inversionistas deben continuar monitoreando los últimos desarrollos inflacionarios, dado que EE.UU. ha emitido más de 6 billones de dólares en estímulos desde el comienzo de la pandemia.
Foto: Dan Smith a través de Wikimedia Commons