Después de seis meses consecutivos de ganancias, el SPDR S&P 500 ETF Trust (NYSE:SPY) se ubica en una buena racha de cara a final de año. Pero el hecho de que la perspectiva económica de Estados Unidos esté mejorando no significa que no haya riesgos reales al acecho que puedan descarrilar el repunte en los próximos meses.
Tom Essaye, de Sevens Report Research, analizó recientemente el panorama del mercado y los factores que podrían mejorar o empeorar las perspectivas de las acciones a corto plazo.
El estado del mercado
Las expectativas de consenso para la compra mensual de activos de la Reserva Federal es que este organismo anunciará un plan para una reducción gradual en algún momento de agosto o septiembre, según Essaye.
Asimismo, el analista espera que la Reserva Federal lentamente levante el pie del acelerador con compras mensuales de activos a partir de finales de 2021 y termine su flexibilización cuantitativa por completo a mediados de 2022.
Además de la incertidumbre que rodea a la acción de la Fed, los casos de COVID-19 en Estados Unidos están en aumento por la variante delta. Sin embargo, Essaye ha afirmado que los gobiernos no están imponiendo cierres en este momento y que los consumidores no parecen estar cambiando su comportamiento de manera significativa.
Finalmente, Essaye ha expresado que las cifras de inflación recientes se han mantenido elevadas pero estables, en línea con las predicciones de la Fed y brindando tranquilidad a los inversores sobre los peligros de hiperinflación a corto plazo.
3 factores a tener en cuenta
De cara al futuro, Essaye ha explicado que un plan de reducción más gradual de la Fed, un pico en los nuevos casos de COVID-19 y un crecimiento económico positivo con una inflación mínima son factores que podrían mantener el S&P 500 en el camino hacia nuevos máximos. Además, nombró tres factores que podrían potencialmente interrumpir la carrera alcista del mercado a corto plazo:
- La Fed implica que la reducción podría comenzar antes de lo esperado o ser más agresiva de lo anticipado.
- Los casos de COVID-19 continúan aumentando y provocan cierres o reducción del gasto de los consumidores.
- El crecimiento económico se estanca y las tasas de inflación continúan aumentando.
Essaye destacó que uno de estos tres resultados podría ser suficiente para detener el S&P 500, pero dos o más podrían crear una volatilidad significativa en el mercado.
“Si ocurren dos de estos eventos, entonces estamos considerando la posibilidad de una corrección del 10% al 20%”, escribió.
La opinión de Benzinga
De los tres posibles factores bajistas que mencionó Essaye, el tercero parece el más aterrador en términos de un potencial impacto negativo duradero. Cualquier venta masiva del mercado basada en la reducción gradual de la Fed o los cierres por la COVID-19 probablemente sería temporal y podría proporcionar una oportunidad de compra para los inversores a largo plazo similar a la que se produjo durante la venta masiva a comienzos de la pandemia durante el mes de marzo de 2020.