Un aprendizaje evidente que traen consigo los inversores desde el 2020 es que las acciones de vehículos eléctricos y los fondos cotizados en bolsa relacionados son el futuro de la inversión automotriz y están que arden.
Lo que sucedió: Existe una variedad de ETF que representan una apuesta creíble en el segmento de vehículos eléctricos, algunos incluso están dedicados al concepto, pero una de las perlas ocultas en el grupo es el ETF SPDR S&P Kensho Smart Mobility (NYSE:HAIL).
Este fondo que rastrea el S&P Kensho Smart Transportation Index, cuenta con 103 millones de dólares aproximadamente en activos bajo administración y ha triplicado su valor desde fines de marzo.
HAIL representa un elemento único en la inversión en vehículos eléctricos, ya que los componentes de su índice subyacente son “empresas cuyos productos y servicios están impulsando la innovación detrás del transporte inteligente, que incluye las áreas tecnológicas en el segmento de vehículos autónomos y conectados, drones y tecnologías de drones utilizadas para aplicaciones comerciales y civiles, además de sistemas avanzados de seguimiento y optimización del transporte ”, reportó State Street.
Por qué es importante: Pese a que este fondo se pondera de forma equilibrada, asigna casi el 5 % de su peso combinado a acciones de Nio (NYSE:NIO) y Tesla (NASDAQ:TSLA), un elemento que es más que suficiente para despertar el interés de algunos inversores.
Lo que es más, ofrece una considerable ventaja con la administración entrante de Biden, que tiene una postura más complaciente sobre temas del medio ambiente y la energía renovable.
“La administración de Biden puede regresar el estándar a niveles elevados y desarrollar nuevos referenciales rigurosos en cuanto a las emisiones de los vehículos para impulsar la innovación y la adopción de tecnología automotriz verde”, según la investigación de State Street.
Asimismo, Biden quiere implementar 500.000 estaciones de carga en Estados Unidos durante la próxima década. Esa es una iniciativa a largo plazo, pero que podría impulsar HAIL porque presenta una exposición a los activos de las estaciones de carga.
¿Qué sigue? El presidente electo estadounidense planea al mismo tiempo aumentar las compras de vehículos eléctricos del gobierno federal. Es algo ampliamente sabido que el país norteamericano es un importante comprador de automóviles, pero su flota actualmente consta de solo un 1 % de vehículos eléctricos. Los aumentos materiales a ese porcentaje podrían ser una bendición para HAIL al igual que los créditos fiscales en curso para los compradores de vehículos eléctricos.
“Además, los legisladores del partido demócrata han estudiado la posibilidad de aumentar la cuota de crédito fiscal para vehículos eléctricos de 1,9 millones a 7,5 millones de autos, sumando a esto 39.000 millones de dólares al costo del crédito, así como también expandir las estaciones de carga a nivel nacional, que de ser promulgado, producirán vehículos más rentables y accesibles para los consumidores”, según información del State Street.
Siendo que se proyecta que los vehículos eléctricos logren llegar a precios equiparables con los de los vehículos tradicionales en los próximos años, HAIL debería beneficiarse de los impulsos disruptivos del crecimiento secular.