- Pandemia 2020, se reconoce la obligación de la mascarilla en Corea
- El aumento de los casos en Europa llama a adoptar unas estrategias y directrices de estilo coreano
- K-Quarantine se ha convertido en un modelo a seguir mientras la COVID-19 se propaga por el mundo
- Se recomienda establecer estándares de tecnología y estrategia basados en el K-Quarantine
- Esperanza de estabilización mediante soluciones K-quarantine compartidas
- Los casos suben a más de 50 millones, se necesita una solución
SEÚL, Corea del Sur, 13 de noviembre de 2020 /PRNewswire/ — Mientras la COVID-19 avanza por el mundo y la cultura del distanciamiento se propaga, la necesidad de un sistema sin contacto también aumenta. Para adaptarse a la nueva normalidad, se necesita entender cómo funcionan las soluciones sin contacto y cómo pueden utilizarse en la pandemia.
Corea ha creado el síndrome “K-quarantine” demostrando su capacidad superior para luchar contra la COVID-19. El autoservicio y los sistemas sin contacto recibieron especial atención, reflejados en el COVID19-guard de Secure World, una nueva solución para la cuarentena.
Secure World (www.secureworld.co.kr) ofrece una solución basada en IA y contribuye a la prevención del virus promoviendo la cultura del distanciamiento, el concepto clave de K-quarantine.
COVID19-guard es un producto guía que puede reconocer varios datos simultáneamente y con precisión; tampoco requiere que haya una persona junto a la máquina o interactuando con ella.
El COVID19-guard automatizado y sin tripulación utiliza el algoritmo Artificial Neural Network para construir un modelo de aprendizaje basado en máquina mediante del reconocimiento, recogido y clasificación de forma repetitiva de los datos. Además, reconoce la ausencia de mascarilla en el reconocimiento de personas; la pantalla identificará a la persona junto con una instrucción por audio para reforzar el uso de mascarillas y crear un entorno seguro.
Mientras el número de casos confirmados sube a 50 millones en el mundo y se ha cobrado ya más de 10.000 vidas, Corea mantiene su incidencia por debajo de 100. Aunque K-quarantine está recibiendo muchos elogios, es muy pronto para que el mundo baje la guardia.
En medio de una segunda ola de COVID-19, Europa destaca el éxito de K-Quarantine. Aunque la obligación de llevar mascarilla y el éxito de los productos K-quarantine en medio del retroceso económico global demuestran logros, el amplio conocimiento de los virus desempeñó importantes roles en la prevención de un brote.
El personal de Secure World deseó que el mundo y Corea pudiesen volver a la nueva normalidad sin COVID-19, así como la rápida recuperación económica de las empresas y la nación para dar la bienvenida al mundo postCOVID-19. “Haremos todo cuanto podamos por ayudar al mundo con COVID19-Guard, que se integra en la infraestructura destacada de K-quarantine y la tecnología”.