BEIJING, 12 de abril de 2022 /PRNewswire/ — Fanjingshan, una montaña de otro mundo situada en la provincia suroccidental de China de Guizhou, alberga dos templos budistas en su cima como uno de los monasterios más extremadamente situados del mundo.
Unidos por un puente entre sí, los dos templos tienen unos 500 años de antigüedad en la dinastía Ming. Con este espléndido patrimonio cultural, la montaña es una de las más recientes maravillas naturales incluidas en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Como pico más alto de las montañas Wuling, Fanjingshan se considera una montaña sagrada en el budismo chino. Su carácter sagrado se ve reforzado por la vista de las nubes de aspecto algodonoso que alfombran el cielo justo delante de ti en la cima de la montaña.
Turistas de todo el mundo están intrigados por ver el asombroso paisaje, algunos de ellos son peregrinos, mientras que muchos son seguidores de Instagram que se quedan atónitos con las fotos.
El relativo aislamiento de Fanjingshan ha garantizado un alto grado de biodiversidad con varias especies endémicas, como el raro mono dorado de Guizhou.
Como aficionado a la exploración salvaje, el vlogger británico Adam emprendió el viaje a la montaña Fanjingshan. Sin embargo, frustrado por el clima nevado del principio, Adam llegó a la cima secundaria debajo del pico donde se encuentran los templos. Vio la vista de las nubes que se extendían cubiertas por el sol, lo que le colmó de satisfacción por la serenidad.
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