La adquisición por parte de Nvidia Corporation (NASDAQ:NVDA) de la empresa británica de semiconductores Arm Ltd. ya se enfrenta a un escrutinio en el país de origen de esta última, y los problemas podrían ser aún peores en China, según informa la CNBC.
Lo que sucedió: Aunque Nvidia tiene su sede en los EE. UU. y Arm en Reino Unido, ambas compañías tienen operaciones en todo el mundo, incluida la Unión Europea y China.
Nvidia llegó a un acuerdo de 40.000 millones de dólares para comprar Arm con su empresa matriz, Softbank Group Corp (OTC:SFTBY), pero dijo que el acuerdo necesitaría la aprobación de las autoridades de los EE. UU., el Reino Unido, la UE y China.
Según Sebastian Hou, director general y jefe de investigación tecnológica de CLSA, el “mayor desafío” para Nvidia y SoftBank sería la posible sanción de los reguladores chinos.
China querría evitar la “pesadilla” de que una empresa estadounidense sea la propietaria de Arm, ya que eso daría pie a que el gobierno de Estados Unidos restringiera su acceso a la tecnología crucial.
“Dadas las tensiones existentes entre EE. UU. y China y la represión de Estados Unidos sobre una serie de empresas tecnológicas chinas, si Arm cayese en manos de Estados Unidos, las empresas tecnológicas chinas quedarían en gran desventaja en el mercado”, escribió el periódico estatal chino Global Times.
Por qué es importante: En abril de 2018, Arm entró en una empresa conjunta con un consorcio de empresas chinas que incluía la Corporación de Inversión China secundada por el estado y el Fondo de la Ruta de la Seda, según South China Morning Post. Las entidades chinas tienen una participación mayoritaria y Arm posee el 49 % de la empresa conjunta.
El modelo de negocio del diseñador de chips británico se basa en la concesión de licencias de su tecnología a otras empresas de tecnología. Según se ha informado, se han enviado a todo el mundo más de 180.000 millones de chips que utilizan la tecnología de Arm y casi todos los teléfonos inteligentes utilizan esta tecnología. El cambio en la propiedad de Arm Holdings podría tener un impacto general en el sector de los semiconductores, especialmente debido a las tensiones entre las dos principales economías del mundo.
El cofundador de Arm, Hermann Hauser, calificó la semana pasada la adquisición de la empresa como un “desastre” para Europa.
El movimiento de los precios: Después de haber avanzado un 1,85 % durante el horario de negociación normal, las acciones de Nvidia ganaron un 1,03 % adicional en la subasta de cierre para establecerse en los 499 dólares.