El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, ha concluido su visita oficial a Rusia, marcando un nuevo capítulo en las relaciones entre Pyongyang y Moscú, según informa la prensa estatal norcoreana, tal como reportó Barron’s.
El viaje de Kim incluyó una inspección de cohetes espaciales y submarinos rusos. Este viaje ha aumentado la preocupación en Occidente sobre la posibilidad de que Pyongyang, armada con armas nucleares, proporcione a Moscú armamento para el conflicto en curso en Ucrania.
Durante su visita de seis días, Kim participó en un intercambio simbólico de rifles con el líder ruso, Vladimir Putin, enfatizando que las relaciones bilaterales con Rusia son su máxima prioridad.
A pesar de la histórica alianza entre Moscú y Pyongyang, Beijing sigue siendo el socio comercial y benefactor crucial de Corea del Norte. La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte señaló que la visita de Kim “profundizó aún más la camaradería y los lazos amistosos con el presidente ruso Putin”.
Tanto Corea del Norte como Rusia están actualmente bajo numerosas sanciones globales; Moscú debido a su invasión en Ucrania y Pyongyang por sus pruebas de armas nucleares. Los expertos sugieren que Rusia está interesada en los proyectiles de artillería de Corea del Norte para utilizarlos en Ucrania, mientras que Pyongyang busca ayuda en tecnología satelital y en la modernización de su equipo militar de la era soviética.
También puedes leer: Expertos advierten sobre el submarino norcoreano de Kim Jong Un
Foto vía Shutterstock