La tasa de infección de Covid-19 de Corea del Norte supera la marca del millón y el país ha registrado ya 56 fallecidos. Ante esto, su líder Kim Jong-Un ha desplegado las “poderosas fuerzas del país en todas las farmacias de la ciudad de Pyongyang y han comenzado a suministrar medicamentos”.
Lo que ha sucedido
El país aislado, sin campaña de vacunación y capacidades limitadas para realizar pruebas, ha culpado y criticado a los funcionarios de sanidad por lo que denomina una respuesta fallida a la prevención de epidemias.
Después de insistir en que el país no se había visto afectado por la pandemia durante más de dos años, el líder supremo ha afirmado que la nación atraviesa un periodo de “gran agitación” debido al coronavirus.
La agencia de noticias estatal KCNA ha anunciado que Kim había emitido una orden para “estabilizar inmediatamente el suministro de medicamentos en la ciudad de Pyongyang involucrando a las poderosas fuerzas del campo médico militar del Ejército Popular“.
Kim, conocido por ordenar la ejecución de cualquier persona sospechosa de trabajar en su contra, también ha advertido a sus fuerzas de 1,2 millones de hombres contra cualquier “pequeña imperfección” en la “dura guerra contra la epidemia”.
Por qué es importante
Según se ha informado, Kim ha recurrido a una fuente familiar de apoyo: el despliegue de poderosas fuerzas en el país para contener el virus. Pero eso también le da poder para arrestar a cualquier persona que se perciba que haya violado las reglas y afirmar el poder del régimen como nunca antes.
A pesar del agotador confinamiento nacional, Corea del Norte lanzó tres misiles balísticos de corto alcance esta semana desde su costa este, con el objetivo de expandir su arsenal militar y endurecer su postura contra Estados Unidos.
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Foto cortesía de Janne Wittoeck en Flickr