El lunes, el Banco Mundial anunció que su Directorio Ejecutivo había aprobado una financiación de 12.000 millones de dólares para que los países en desarrollo compren y distribuyan vacunas, pruebas y tratamientos para la Covid-19.
Lo que sucedió: Esta suma apoyará la vacunación de hasta mil millones de personas y forma parte de un paquete más grande del Grupo Banco Mundial de 160.000 millones de dólares destinado a ayudar a 111 países en desarrollo a combatir la pandemia, según informó el Banco Mundial en un comunicado.
La institución financiera dice que la nueva ronda de financiación es una señal para la industria farmacéutica y de investigación que les advierte de que los ciudadanos de las naciones en desarrollo también necesitan tener acceso a vacunas para la Covid-19 seguras y efectivas.
Por qué es importante: El Grupo Banco Mundial declaró que tiene “experiencia significativa” en el apoyo a programas de inmunización a gran escala para enfermedades prevenibles mediante vacunación.
La Corporación Financiera Internacional (IFC), entidad del sector privado del Grupo Banco Mundial, va a invertir 4000 millones de dólares en fabricantes de vacunas a través de su plataforma de Salud Global.
En la implementación de su programa, el Banco Mundial apoyará los esfuerzos multilaterales liderados por la Organización Mundial de la Salud y COVAX.
Recientemente, China se convirtió en la mayor economía en unirse a la iniciativa COVAX. El presidente Xi Jinping prometió 2000 millones de dólares para luchar contra las consecuencias de la pandemia.
Moderna Inc (NASDAQ:MRNA) y Pfizer Inc (NYSE:PFE) van en cabeza en la carrera para desarrollar una vacuna para la Covid-19.
Las vacunas de Novavax, Inc (NASDAQ:NVAX) y Sanofi SA (NASDAQ:SNY) también se están sometiendo a ensayos clínicos.
Mientras tanto, el lunes, Johnson & Johnson (NYSE:JNJ) sufrió un revés cuando el ensayo de su vacuna se detuvo porque un voluntario desarrolló una enfermedad inexplicable. Los ensayos de AstraZeneca plc (NYSE:AZN) permanecen suspendidos en los Estados Unidos después de que un paciente desarrollara síntomas de un trastorno neurológico grave.