Los mercados emergentes representan una de las categorías de activos que generan mucha expectación como idea para el próximo año. Al haber registrado un aumento del 4,5 % durante el mes pasado, el índice de mercados emergentes MSCI ya se encuentra valorando ese entusiasmo.
Ya era hora.
Pese al impulso que han registrado las acciones estadounidenses durante la última década, los equivalentes de los mercados emergentes se han operado principalmente de forma lateral. Animados por la perspectiva de un cambio de escenario dentro del gobierno, un dólar débil y valoraciones atractivas, entre otros factores, se perciben factores a favor para que las acciones del mundo en desarrollo prosperen en el nuevo año.
“El dolar estadounidense conforma una parte esencial de esa posible reversión media, según mi percepción. Para que los resultados que obtengan los mercados emergentes sean mejores de manera cíclica y secular, será necesario que el dolar empiece su recorrido descendente”, escribe Jurrien Timmer, director macro de Fidelity en la división de asignación de activos de la empresa. “Después de todo, para un inversor que viva en los Estados Unidos, el riesgo cambiario conforma una parte importante de los factores si se invierte en mercados foráneos”.
Teniendo el impulso en mente, aquí hay tres fondos de mercados emergentes para considerar ahora y de cara al próximo año.
Alpha Architect Freedom 100 Mercados Emergentes ETF (FRDM)
El Alpha Architect Freedom 100 Mercados Emergentes ETF (CBOE:FRDM) está rindiendo de manera muy superior al índice de mercados emergentes MSCI por casi 50 puntos básicos este año. Sin añadir mucho más, eso, es bastante impresionante, pero esa estadística mejora mucho más y de forma agradable, cuando se considera que FRDM no presenta ninguna exposición directa a China, uno de los principales mercados de valores con mejor desempeño en 2020.
La metodología de ponderación de libertad de este ETF aleja las asignaciones geográficas de FRDM de países con antecedentes poco confiables en materia de derechos humanos, entre otros factores, por lo que este no representa un fondo para inversores que buscan exposición a China o Rusia.
Su historia de bienestar tiene un impacto material para los inversores. Uno de los factores principales es el bajo riesgo que representa la combinación de los mercados de Taiwán y Corea del Sur, que corresponden a más de la mitad de la ponderación geográfica del fondo, FRDM tiene una ponderación del 39,19 % en las acciones de tecnología, o aproximadamente el doble de la que tiene el índice de mercados emergentes del MSCI en el mismo sector.
KraneShares Emerging Market Healthcare Index ETF (KMED)
KraneShares Emerging Market Healthcare Index ETF (NYSE:KMED) es un diamante en bruto entre los ETF de mercados emergentes. Sin lugar a dudas, el segmento de atención médica en Estados Unidos es bastante sólido y cuenta con una plétora de opciones para inversores de todas las tolerancias de riesgo, pero KMED aporta crecimiento a la tabla de ETF de atención médica.
“De cara a las próximas dos décadas, se proyecta que los países que cuentan con mercados emergentes aumentarán en promedio el gasto en atención médica como porcentaje del PIB en un 24,4 %, número que contrasta con solo el 9,8 % en los mercados desarrollados durante el mismo período de tiempo”, según KraneShares.
Este ETF ya está ofreciendo resultados a los inversores. El fondo KraneShares ha visto un alza del 64 % durante el año pasado, mientras que el índice S&P 500 Health Care se ha negociado un 13,12 % más alto durante ese mismo tiempo.
WisdomTree Emerging Markets ex-State-Property Enterprises Fund (XSOE)
WisdomTree Emerging Markets ex-State-Owned Enterprises Fund (NYSE:XSOE), una forma diferente de superar los puntos referenciales tradicionales, se centra en los sectores en crecimiento al excluir empresas en las que los gobiernos poseen participaciones importantes, también conocidas como empresas estatales (SOE, por sus siglas en inglés).
Este ETF no se involucra con áreas problemáticas como el sector de la energía (precios bajos del petróleo) y los servicios financieros (préstamos en mora) para añadir valoración a los sectores de crecimiento, como los servicios de comunicaciones y el consumo discrecional.
La estrategia de este fondo funciona ya que ha cotizado en números verdes con un incremento del 23,06 % este año.