A veces, la mejor jugada en bolsa es simplemente esperar. En medio de un clima global incierto y tras semanas de fuerte impulso, el Ibex 35 parece haber optado por hacer una pausa. Mientras algunos podrían ver esta lateralidad como una señal de agotamiento, otros, como el analista Joan Cabrero, la leen como una tregua estratégica: una respiración profunda antes de otro posible salto.
Lo que sucedió
En las últimas sesiones, el Ibex 35 ha entrado en un proceso de consolidación, moviéndose de forma lateral tras una etapa de fuertes subidas. Este comportamiento ha servido para enfriar los indicadores de sobrecompra, es decir, niveles en los que los precios suben tan rápido que podrían estar sobrevalorados.
Este patrón también se refleja en el EuroStoxx 50, que ha encadenado siete jornadas dentro del rango marcado por la vela del 23 de mayo, fecha clave en la que los bajistas intentaron retomar el control del mercado. Sin éxito. Esta resistencia a caer es interpretada por expertos como Cabrero como una señal de fortaleza del mercado europeo, no de debilidad.
El analista de Ecotrader afirma que sería “sorprendente” ver una corrección profunda del EuroStoxx 50 antes de que alcance sus máximos anuales. Eso dejaría un margen de subida adicional de entre el 4 y el 5 %, abriendo la puerta a nuevas oportunidades alcistas a corto plazo.
En el caso concreto del Ibex 35, Cabrero sugiere que esta fase de pausa podría ser la antesala de un nuevo tramo alcista. El selectivo español podría aspirar a alcanzar el techo del canal que guía sus subidas desde 2022, situado actualmente en los 14 750 puntos, o incluso en los 15 000 si el mercado se toma algo más de tiempo.
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Por qué es importante
Esta consolidación en el Ibex 35 no sucede en el vacío: llega en un momento en que la economía estadounidense, la más influyente del planeta, ha mostrado señales de estabilidad. El reciente repunte en las ofertas de empleo alivia el miedo a una recesión y refuerza la idea de que la Reserva Federal mantendrá los tipos de interés estables, un ancla de confianza para los mercados globales.
A nivel técnico, los analistas interpretan que mientras el EuroStoxx 50 no pierda niveles clave y mantenga su estructura actual, hay margen para que continúe subiendo. Esa lateralidad contenida no es desorientación, sino acumulación de fuerzas. Un descanso controlado en la subida.
Por último, el caso español tiene un tinte particular. Según una encuesta del Instituto Español de Analistas, el Ibex 35 podría comportarse mejor que otras bolsas europeas. La presidenta del Instituto, Lola Solana, lo resumió con contundencia: “España es un oasis”. Entre balances empresariales sólidos, tipos de interés bajando y mayor renta disponible, el argumento es claro: el suelo bajo los pies del Ibex parece firme.
Imagen creada con Inteligencia Artificial
Esta historia fue generada por Benzinga Neuro y editada por Edgli Romero
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