El banco español CaixaBank (BME:CABK) ha completado la recompra de 89,37 millones de acciones propias, equivalentes al 1,25 % de su capital social, con una inversión total de 500 millones de euros. Con este paso, la entidad culmina una de las piezas clave de su plan estratégico 2022-2024, reafirmando su compromiso con la creación de valor para el accionista.
Lo que sucedió
CaixaBank comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la finalización de su programa de recompra de acciones, iniciado el 19 de noviembre del pasado año y gestionado por Goldman Sachs. La entidad adquirió un total de 89.372.390 títulos, por un importe global de 500 millones de euros, equivalentes al 1,25 % de su capital.
El objetivo del programa era reducir el capital social de CaixaBank mediante la amortización de las acciones recompradas, en línea con los acuerdos aprobados por la junta general de accionistas. Esta medida busca optimizar la estructura de capital y reforzar la rentabilidad por acción.
Hasta la semana anterior al cierre, la entidad había invertido 490,3 millones de euros en la adquisición de 87,99 millones de acciones, alcanzando el 98 % del programa. El banco respetó los límites regulatorios, como no superar el 25 % del volumen diario medio de negociación en cada sesión.
Esta recompra se enmarca dentro del conjunto de programas anunciados por CaixaBank, que suman 3.800 millones de euros desde 2022. Con ello, la entidad consolida su posición como uno de los actores más sólidos del sector financiero español, avanzando hacia los objetivos de su plan estratégico.
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Por qué es importante
Este 13 de octubre, las acciones de CaixaBank (CABK) abrieron en el IBEX 35 a 9,09 euros por título, con una variación positiva del 1,02 %. La cifra refleja un cierto optimismo tras la noticia de la recompra, interpretada por el mercado como una señal de confianza en la solidez de la entidad.
Durante los últimos diez días, la acción ha mostrado una evolución mixta, subidas y caídas que dibujan una respiración natural del mercado, aunque en los días recientes ha logrado estabilizarse. Esa calma coincide con una volatilidad semanal del 15,08 %, muy por debajo del 28,83 % anual, lo que sugiere que los inversores perciben menor incertidumbre en torno al valor.
A lo largo del último año, CaixaBank ha oscilado entre un mínimo de 5,02 euros y un máximo de 9,10 euros. Hoy se sitúa en la parte alta de esa horquilla, reflejo de un ciclo de recuperación sostenida. Además, la entidad mantiene un beneficio neto de 5.790 millones de euros y continúa retribuyendo a sus accionistas con un dividendo estimado del 0,0488 %. En otras palabras, la recompra no solo devuelve capital, sino que refuerza el atractivo de CaixaBank en un entorno bancario en transformación.
Imagen: Wirestock Creators / Shutterstock.com
Esta historia fue generada por Benzinga Neuro y editada por Edgli Romero
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