Goldman Sachs ha intensificado su presencia en el accionariado de Iberdrola (BME:IBE) con una compra sustancial que lo posiciona como uno de los grandes jugadores en la energética española. Con una participación que ya alcanza el 4,303 %, el banco estadounidense reafirma su confianza en el modelo de negocio y la trayectoria de la compañía liderada por Ignacio Sánchez Galán.
Lo que sucedió
Goldman Sachs ha adquirido un 1,582 % adicional del capital de Iberdrola en los últimos meses, elevando su participación total hasta el 4,303 %, según datos registrados en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta posición incluye tanto acciones directas como instrumentos financieros derivados.
A los precios actuales de mercado, esta participación está valorada en más de 1500 millones de euros, lo que convierte a Goldman Sachs en el tercer mayor accionista de la compañía. Solo Qatar Investment Authority (8,85 %) y BlackRock (6,254 %) poseen mayores participaciones.
El movimiento refuerza el interés internacional por Iberdrola, que ha visto cómo sus acciones subían hasta los 15,63 euros este lunes, con un avance del 0,35 %, acercándose a máximos anuales. Desde el año 2001, el valor por acción se ha multiplicado por más de cuatro veces.
En términos de capitalización bursátil, la firma ha experimentado un crecimiento explosivo, superando ya los 90 000 millones de euros. Quienes han reinvertido dividendos han logrado una rentabilidad superior al 1000 %, un dato que no pasa desapercibido para los grandes fondos.
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Por qué es importante
La apuesta de Goldman Sachs no es aislada. Morgan Stanley también ha revisado al alza sus proyecciones sobre Iberdrola, elevando su estimación de beneficio neto subyacente para 2025 a 6000 millones de euros. Este optimismo se alinea con la expectativa de crecimiento de doble dígito en los beneficios de este año.
Con la mirada puesta en el Día del Inversor del próximo 24 de septiembre, Morgan Stanley anticipa una senda de crecimiento sostenido entre 2025 y 2027, especialmente en el área de redes eléctricas, un segmento clave en la transición energética. La firma también ha incrementado su precio objetivo para las acciones de Iberdrola hasta los 17 euros, y hasta 19 euros en un escenario más favorable.
El respaldo simultáneo de dos gigantes de la inversión como Goldman Sachs y Morgan Stanley actúa como termómetro del atractivo que mantiene Iberdrola a nivel global. En un entorno donde la descarbonización es prioridad, su perfil estable, diversificado y en crecimiento sostenido la coloca en el radar de los inversores institucionales.
Imagen creada con Inteligencia Artificial
Esta historia ha sido editada por Edgli Romero
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