Banco Santander (BME:SAN) vive un 2025 de vértigo: sus acciones acumulan una revalorización del 89 %, el mejor desempeño desde que cotiza en el IBEX 35. Este impulso bursátil llega acompañado de una reestructuración clave, la fusión de Santander Consumer Finance y Openbank, que refuerza su apuesta por la eficiencia, la digitalización y la rentabilidad minorista en Europa.
Lo que sucedió
El grupo presidido por Ana Botín ha decidido integrar sus dos grandes divisiones de banca de consumo en Europa bajo una sola marca: Openbank by Santander. La operación supone la unión de Santander Consumer Finance (SCF), centrada en crédito al consumo y financiación de vehículos, con el banco digital Openbank, especializado en captación de depósitos y servicios online.
Esta fusión se pondrá en marcha primero en España y Alemania, los dos mercados clave de la entidad, y se extenderá progresivamente a los 17 países europeos donde opera SCF y los 4 adicionales de Openbank. Ambas unidades ya compartían consejo de administración y una gestión coordinada, lo que facilitará una transición más fluida.
Según los analistas de GVC Gaesco, el movimiento “simplifica el área de consumo en Europa y puede generar ahorros de costes significativos”, aunque el banco aún no ha cuantificado su impacto. La sinergia entre ambas actividades, una generadora de crédito, la otra de depósitos, permitirá optimizar el balance y reforzar la rentabilidad minorista.
Con esta integración, Santander busca mejorar la eficiencia operativa y avanzar en su hoja de ruta hacia una rentabilidad del 16,5 % en 2025. GVC Gaesco mantiene su recomendación de compra sobre el valor, convencida de que el grupo tiene margen para seguir elevando la remuneración al accionista.
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Por qué es importante
El contexto acompaña: Santander encara este nuevo paso con unas acciones que, pese al rally del 89 %, mantienen múltiplos prudentes, un PER de 9,6 veces y una ratio precio/valor en libros de 1,42, en línea con el promedio del sector español. Frente a gigantes europeos como UBS o Deutsche Bank, el valor sigue ofreciendo una valoración atractiva para los inversores más pacientes.
El banco no solo busca simplificar estructuras; también consolidar su liderazgo digital en un momento en que la banca europea se redefine. Mientras BBVA y Sabadell concentran la atención con su opa, Santander avanza en silencio en su “One Transformation”, un programa que persigue economías de escala y eficiencia interna. Como resume Nuria Álvarez, de Renta 4, se trata de “impulsar los ahorros desde dentro, integrando estructuras”.
En el mercado, sin embargo, la euforia se ha enfriado. Este viernes 17 de octubre, las acciones del banco cotizan a 8,23 euros, con un descenso del 4,07 % y una tendencia mayormente negativa en los últimos diez días. Aun así, la volatilidad semanal del 28,3 % es inferior a la del último año, señal de una mayor estabilidad. Los analistas de Deutsche Bank prevén que los resultados del 29 de octubre serán “sin sobresaltos”, lo que podría reactivar el interés de los inversores.
Imagen: MOZCO Mateusz Szymanski / Shutterstock.com
Esta historia fue generada por Benzinga Neuro y editada por Edgli Romero
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