El Ibex 35 amanece con paso firme este 29 de octubre, sostenido por el músculo de las grandes “utilities”. Mientras los bancos consolidan avances y el mercado calibra la próxima decisión de la Reserva Federal, las acciones de Endesa (BME:ELE), Enagás (BME:ENG) y Naturgy (BME:NTGY) protagonizan una jornada que mezcla prudencia, dividendos atractivos y la búsqueda de refugio en sectores estables.
Lo que sucedió
Endesa sorprendió al mercado al anunciar un beneficio neto de entre 1.710 y 1.711 millones de euros en los primeros nueve meses de 2025, lo que supone un crecimiento cercano al 22 % frente al año anterior. El avance se apoya en una recuperación del consumo y en un entorno favorable para su negocio de generación eléctrica, dos vientos que impulsan sus resultados hacia los objetivos anuales.
Este repunte refuerza la imagen de Endesa como valor defensivo dentro del Ibex 35. En tiempos de tipos de interés altos y volatilidad en los mercados, la eléctrica ofrece previsibilidad y rentabilidad por dividendo, cualidades que los inversores suelen premiar.
No obstante, el equilibrio no está exento de riesgos. El endeudamiento crece y los costes de mantenimiento de la red presionan los márgenes, al tiempo que la evolución regulatoria puede alterar las reglas del juego en remuneración o tarifas. En otras palabras: hay fortaleza, pero también nubes en el horizonte.
En paralelo, Enagás confirmó su salto estratégico con la adquisición del 51 % restante de Axent Infraestructuras, un movimiento que le otorga el control total de esta firma de telecomunicaciones. El impacto estimado, unos 15 millones de euros adicionales de beneficio neto para 2025, ilustra cómo la empresa está diversificando más allá del gas, explorando nuevas autopistas de crecimiento.
Naturgy, por su parte, mantiene su foco en las redes y la transición energética. Dentro de su plan 2025-2027, prevé inversiones superiores a 6.400 millones de euros, gran parte destinadas a redes reguladas de gas. El objetivo: garantizar flujos estables y retornos atractivos en un contexto de tipos aún elevados, aunque el éxito dependerá de un marco regulatorio que acompañe.
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Por qué es importante
El contexto macro ayuda. El PIB español creció un 0,6 % intertrimestral en el tercer trimestre y las ventas minoristas avanzaron un 6,2 % en septiembre, señales de una demanda interna que sigue viva pese al enfriamiento global. En ese entorno, las “utilities” ganan protagonismo como valores de estabilidad y flujo de caja sólido.
El Ibex 35 cotiza en 16.167,9 puntos (+0,50 %), en una sesión marcada por la prudencia. La rotación hacia valores que ya han publicado resultados, como Endesa o Naturgy, muestra que los inversores buscan certezas antes del anuncio de política monetaria de la Reserva Federal.
En conjunto, los beneficios y dividendos del sector energético aportan equilibrio a un mercado que se mueve entre la confianza y la cautela. El resultado: un Ibex que resiste por encima de los 16.000 puntos, mientras los inversores ajustan el rumbo sin perder de vista la rentabilidad regulada… y la promesa de estabilidad.
Imagen: Shutterstock
Esta historia fue generada por Benzinga Neuro y editada por Edgli Romero
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