El mes pasado, el exchange de criptomonedas regulado FTX firmó un acuerdo de inversión y de embajador de marca con el empresario, capitalista de riesgo e inversor de “Shark Tank” Kevin O’Leary.
Desde la primera información en profundidad de Benzinga sobre el asunto, se reveló que la Comisión de Bolsa y Valores evaluaría críticamente el mercado naciente y potencialmente tomaría medidas enérgicas contra productos emergentes como el servicio de préstamos de criptomonedas propuesto por Coinbase Global Inc (NASDAQ:COIN).
O’Leary actualizó a Benzinga sobre su intención de perfeccionar la asociación de FTX, así como de fomentar la innovación y la evolución regulatoria en el amplio espacio de las criptomonedas.
Por qué
“Cuando los hechos cambian, yo cambio”.
Eso es lo que O’Leary le dijo a Benzinga hace semanas en referencia a un claro cambio en el margen regulatorio que inspiró su participación en el espacio de las criptomonedas. En pocas palabras, el empresario tiene demasiadas inversiones en sus manos por lo que no tiene la opción de estar fuera del juego.
“Los inversores institucionales luchan con la decisión de invertir en criptoactivos. No porque no quieran, sino porque tienen dificultades para saber con certeza que cumplirán al 100% con los reguladores y los requisitos de presentación de informes”, tal y cómo comentó O’Leary a Benzinga en una actualización.
Con esa evolución regulatoria, el empresario buscó obtener rendimientos en efectivo a partir de desinversiones inmobiliarias; suscribió contratos de corta duración sobre productos como el USDC obteniendo rendimientos a veces tan altos como el 5%.
El proceso para hacer eso fue difícil ya que no había infraestructura para el cumplimiento como en el mercado de divisas, bonos o acciones. Eso significa que las instituciones que ejecutan mandatos de 1.000 millones de dólares para fondos soberanos, por ejemplo, no pueden obtener los informes de valor de mercado necesarios para el cumplimiento normativo.
Fue entonces cuando O’Leary configuró una infraestructura con FTX, una criptomoneda de nivel institucional que respaldaba con orgullo dada la facilidad con la que los departamentos de cumplimiento y los auditores externos pueden auditar la actividad en la plataforma.
“Para encontrar oportunidades de inversión en criptomonedas que concordaran con mis propios estándares rigurosos de cumplimiento, entré en esta relación con FTX”, señaló.
“FTX aprovecha la mejor tecnología de su clase para brindar una experiencia comercial de calidad con tarifas bajas tanto para inversores profesionales como minoristas, mientras que al mismo tiempo proporciona la plataforma de informes que obedece a los requisitos de cumplimiento tanto internos como regulatorios”.
Detalles de la asociación de O’Leary con FTX
O’Leary confía en que puede aumentar la ponderación de criptomonedas de su cartera al 7%. La capacidad de monitorear las posiciones cada segundo y generar informes al final del día es una parte esencial de la participación compatible en este mercado naciente, según afirmó a Benzinga.
“Quiero aumentar mi exposición a las criptomonedas, pero también obedecer mis mandatos de cumplimiento. Cuando se trata de requisitos de cumplimiento e informes fiscales que cambian rápidamente, el ecosistema de criptomonedas actual está plagado de riesgos que no puedo asumir”.
Cabe señalar que, junto con la participación accionaria en FTX Trading Ltd. y West Realm Shires Services Inc., los propietarios y operadores de FTX.com y FTX.US, O’Leary aceptará el pago por su condición de embajador en criptomonedas.
Además, los traders de FTX ayudarán al empresario a diversificar y divulgar las tenencias de su cartera.
Impacto en la innovación
Cuando se le preguntó sobre las innovaciones en las que está más interesado en dedicar tiempo, O’Leary señaló las finanzas descentralizadas, conocidas coloquialmente como DeFi, un modelo que replica la creación de mercado, los préstamos y el intercambio sin costosos intermediarios institucionales.
“Si quiero comprar acciones [en otro lugar], tengo que comprarlas en la moneda local en la bolsa local. Cada vez que hago eso, me recortan varios puntos básicos y no hay valor allí”, señaló.
“Cuando consigamos operar DeFi, eliminaré a todos esos intermediarios y se quedarán sacándole brillo a sus zapatos”, añadió O’Leary, apuntando a organizaciones como FTX y WonderFi, iniciativas líderes en el espacio.
En referencia al entorno regulatorio, O’Leary destacó que agradece la claridad y cree que los participantes no pueden operar si no conocen las reglas. Si llega la claridad regulatoria, flujos de billones de dólares atravesarían el mercado, aumentando la liquidez y atrayendo innovación, señaló.